viernes, 13 de abril de 2007

El ojo arbitrario

Libros prestados. Lorena me da por unos días “Los cínicos no sirven para este oficio”, conversaciones del mítico periodista polaco Ryszard Kapuscinski con distintos interlocutores acerca del oficio de ver y contar, el mundo, la gente, África, los viajes. Editado por Anagrama, el sello gourmet de Jordi Herralde, en Barcelona, es leído en una hora y cinco minutos. Lo devuelvo a la dueña.

Mery, nuestra potente blogger –tiene 24 años, es lectora furibunda, egresada en periodismo por la UBA con remate en forma de tesis sobre la era posthumana y la presencia creciente de los cyborgs, hombres y máquinas a un tiempo, alta y guapa con hombros de windsurfista, que lo es-, me prestó hace un tiempo “Rascacielos”, novela de J.G.Ballard, uno de sus gurúes, y uno de los míos. Leído también a buena velocidad, no lo encuentro en el despelote de las bibliotecas. Está aquí, donde ahora escribo esta pequeña historia, pero necesito tiempo . Una vida algo errabunda, países, ciudades, cabezas distintas, mujeres magistrales de todo tamaño y de todo idioma, en fin, no dejaron prosperar el placer del orden. Demasiadas casas, demasiadas cosas. Tiempo, y va de vuelta, Mery.

. Los carteles de campaña de los candidatos, en Buenos Aires, hacen centro en cierta clase de broma que descalifica al otro. No en todos los casos, es cierto, pero se ven muchos carteles con bromas, equívocos intencionales, tomaduras de pelo. Todo muy inmaduro, de fiesta de estudiantes a fin de año. Cruzar la ciudad y verlos, produce una rara tristeza: la mediocridad ha triunfado.


Mario.


eltoquemactas@gmail.com

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Estimado Sr. Mactas,
Tomando al toro por el detalle de un cuerno, veo que nombra Ud. al bueno de Ballard. Si de recomendaciones se trata, permítame Ud, sugerirle la lectura de "I Believe", de J. G. Ballard, o, en la ya excelente traducción que --años ha-- hiciera Carlos Gardini para "El Péndulo", "Credo".
Sin más, y disfrutando de mi residencia de primavera, lo saludo con la cordialidad de siempre.

Isztván Karl Béhstork

Anónimo dijo...

Estimado Isztván : rápida como una barracuda, Mary Blogger ha puesto, habrá visto, el tremendo credo de Ballard.Gracias.
Mario.

Anónimo dijo...

Estimado Mario, estimada Mary Blogger (creo vislumbrar aquí la tenue sombra de un pseudónimo), el texto completo del "Credo" de Ballard lo pueden encontrar en http://luzdelimbo.blogspot.com/2006_03_01_archive.html
Hasta acá nos venimos perdiendo de líneas hermosas como "Creo en la belleza misteriosa de Margaret Thatcher, en el arco de sus fosas nasales y el borde de su labio inferior; en la melancolía de los conscriptos argentinos heridos; en las sonrisas perturbadas de los empleados de estaciones de servicio; en mi sueño sobre Margaret Thatcher acariciada por ese joven soldado argentino en un motel olvidado, observados por un empleado de estación de servicio tuberculoso" o como "Creo en la luz que arrojan las videograbadoras en las vidrieras de las grandes tiendas, en la agudeza de las parrillas de los radiadores en los salones de venta de automóviles, en la elegancia de las manchas de aceite sobre las barquillas de los motores de los 747 estacionados en las pistas de los aeropuertos" o como en "Creo en la amabilidad del bisturí, en la geometría sin límites de la pantalla de cine, en el universo oculto dentro de los supermercados, en la soledad del sol, en la locuacidad de los planetas, en la redundancia de nosotros mismos, en la inexistencia del universo y el aburrimiento del átomo".
Quizá hayan Uds. decidido editar el texto de Ballard, pero, no sé, no estoy seguro, no los creo capaces de tal sacrilegio (si bien los creo capaces de otros sacrilegios).

Salud y euros.

Isztván Karl Bèhstork

Mario Mactas dijo...

Hellou Isztván! gracias por avisarme del grave error que cometí!; en mi afán de querer complacerlos a todos con esta obra maestra de Ballard, subí otra versión de la poesía, más corta y con otra traducción.
Pido disculpas.
El texto lo pedí prestado de la página de mi profesor Christian Ferrer: http://www.revistaartefacto.com.ar/numero4.htm
Les sugiero que entren, pues también hay otras notas de Ballard, como "¿Cuál es el camino al espacio interior?" escrita para New Worlds, en 1962.
Allí dice, entre otras cosas, esto: "Por último, recuerdo el traje de buzo que Salvador Dalí usó para dar una conferencia en Londres hace unos años. El operario al que habían enviado a supervisar el traje preguntó a qué profundidad Dalí pensaba descender, y el maestro exclamó con gesto ceremonioso: “Hasta el Inconciente”, a lo que el operario respondió sagazmente: “Me temo que no podemos descender tanto”. Cinco minutos después, en efecto, Dalí casi se ahoga dentro de la escafandra.

Es ese traje para el espacio interior el que aún se necesita. ¡Depende de la ciencia ficción construirlo!"


cariños!
Mery